En el marco del Día Mundial de la Fibrosis Quística, especialistas del Servicio de Neumonología del Hospital Escuela de Agudos “Dr. Ramón Madariaga” informan sobre esta patología, una de las más frecuentes entre las enfermedades raras.
En este sentido, la Neumonóloga del mencionado centro asistencial, Dra. Susana Azcona, explicó de qué se trata esta enfermedad genética que afecta varios órganos: “La fibrosis quística puede involucrar el sistema respiratorio, el hígado, el sistema reproductivo, el páncreas, las glándulas de secreción interna y las sudoríparas”.
Una de las manifestaciones de esta patología, precisó Azcona, es el incremento de moco espeso; a nivel respiratorio es un factor de riesgo de infecciones bacterianas multirresistentes, y con el tiempo puede disminuir la capacidad pulmonar.
Asimismo, afirmó que la fibrosis quística no tiene cura, pero con un tratamiento oportuno y con detección temprana, puede mejorar la calidad de vida y mejorar el pronóstico de la enfermedad.
Con respecto a los grupos de riesgo, la profesional mencionó: “Generalmente se detecta en la niñez. Los síntomas a tener en cuenta son las repeticiones de infecciones respiratorias, puede presentar un déficit de crecimiento, bajo peso; puede traer como consecuencia la desnutrición”. Además, aclaró que en muchos casos no se presentan síntomas en la niñez, apareciendo éstas recién en la adolescencia. “Hemos tenido diagnósticos en personas adultas que no tuvieron síntomas respiratorios, por lo que fue un gran hallazgo”, afirmó.
Asimismo, precisó que la fibrosis quística puede afectar a nivel sexual, por lo que muchas veces el diagnóstico se hace cuando se llevan adelante estudios genéticos de fertilidad.
Finalmente, recordó que el Hospital Escuela dispone de profesionales de diferentes especialidades para atender casos de fibrosis quística en adultos (a partir de los 15 años).
8 de septiembre: Día Mundial de la Fibrosis Quística
La Asociación Internacional de Fibrosis Quística, en concordancia con la Organización Mundial de la Salud (OMS), decretaron que cada 8 de septiembre se conmemoraría su día mundial para concientizar e informar a la población alrededor del globo sobre las consecuencias que genera la afección y las vías para arribar a un diagnóstico oportuno.